Dos de las cosas más valiosas que tenemos son el tiempo y nuestras relaciones con otras personas. En nuestra era de distracciones en aumento, es más importante que nunca encontrar la forma de conservar la perspectiva y recordar que la vida es breve y delicada.
En su barrio de Nueva Orleáns, la artista y TED Fellow Candy Chang hizo de una casa abandonada una pizarra gigante pidiendo completar la frase: «Antes de morir quiero…». Las respuestas de sus vecinos –sorprendentes, agudas, divertidas– se convirtieron en un espejo inesperado para la comunidad. (¿Cuál es tu respuesta?)
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